La osteopatía es una excelente opción de terapia complementaria que puede mejorar significativamente la salud y el bienestar de ambos. Los terapeutas osteópatas pueden trabajar junto con las matronas y otros profesionales de la salud para crear planes de tratamiento personalizados para cada paciente, lo que puede ayudar a asegurar que los beneficios de la terapia sean máximos.
Para los recién nacidos, la osteopatía puede ser una excelente opción para tratar problemas de salud comunes como cólicos, estreñimiento, problemas de lactancia, problemas para dormir y reflujo gastroesofágico. La terapia puede ayudar a aliviar la tensión y el estrés en el cuerpo del bebé, lo que puede ayudar a mejorar la calidad de vida tanto para el bebé como para la madre.
Durante el embarazo, la osteopatía puede ayudar a aliviar dolores y molestias comunes como dolor de espalda, cuello, piernas e incluso mejorar la digestión y la circulación sanguínea. La técnica también puede ayudar a reducir la presión en los nervios y los músculos, lo que puede mejorar la calidad del sueño y reducir el estrés y la ansiedad.
